Curiosa paradoja la del mercado del arte: los precios en las subastas no se rinden, mientras que los datos de la economía real siguen su tendencia a la baja. Algo ciertamente sorprendente, sobre todo cuando en América el crecimiento ya no es desaceleración sino más bien estancamiento o recesión, según se puede leer en las páginas de El Correo Digital.
Pero lo último, el no va más en este autismo del mercado artístico es el anuncio de un posible récord para un artista vivo. ¿Seguirá la paradoja?, se pregunta Enrique Portocarrero, autor del artículo, y considera que tal vez sí, aunque esa contradicción tiene por el momento sus explicaciones.
La primera se refiere al bajo cambio del dólar, una situación que posibilita la compra a buen precio por parte de inversores y coleccionistas de Europa y Asia, donde todavía hay liquidez y tasas de crecimiento económico en positivo. Además, con los tipos de interés por los suelos y la incertidumbre instalada en las bolsas, el arte todavía parece un buen destino para las inversiones.
La crisis 'infecta' al mercado de arte
No obstante, según se puede leer en Cotizalia, "es cuestión de tiempo que la crisis provocada por las hipotecas de alto riesgo pasara factura al mercado del arte, más teniendo en cuenta que tradicionalmente este sector ha sido un buen refugio para el capital procedente del mercado inmobiliario y de hedge funds. Si no hay dinero las obras no se venden o, lo que es peor, los pagos por aquellas piezas ya adquiridas se retrasan".
Eso mismo es lo que le está pasando a Sotheby´s, una de las principales casas de subastas de Estados Unidos, que ha visto como en 2007 se han doblado sus ‘cuentas pendientes’.
Si los clientes no pagan eso implica problemas. No en vano, según informó Cotizalia.com el pasado mes de noviembre, la crisis subprime podría pinchar también la burbuja del arte y todo apunta a que el sector empieza a perder fuelle. Una de las primeras señales de alarma se produjo cuando a finales de año Sotheby´s se quedó con colgado con 56 de los 76 lotes presentados, entre ellos un Van Gogh, Los Campos de Trigo, cuyo precio de salida estaba estimado en los 17 millones de dólares.
Ahora, según el informe anual de la famosa casa de subastas, las cuentas pendientes alcanzaron en 2007 los 835 millones de dólares, la suma más elevada de la historia de la firma, de la que sólo más de 520 millones de dólares se produjeron en el último trimestre del año, justo después de que estallara en agosto definitivamente la crisis financiera.
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